Examen teórico...

... Y llegó la fecha de afrontar el primer intento para superar el examen teórico!!

No las tenía todas conmigo... Justo un mes antes de la fecha del examen, cambiaron la normativa que regula el vuelo en ULM, y precisamente los cambios afectaban a la manera de examinarse, con nuevas materias, separando las habilitaciones según el tipo de aeronave y con un incremento de un 50% de las horas de vuelo necesarias para presentarse al examen práctico.

Nuestro instructor Benito nos dedicó las últimas 4 clases teóricas a preparar el examen realizando triángulos de viento, mostrándonos la forma de leer las cartas aeronáuticas y entregándonos un largo listado de preguntas de examen de todas y cada una de las materias. Con todo y con eso, mi amigo Víctor y yo, nos encerramos los últimos 3 días previos al examen en casa para machacar sin descanso las más de 4000 preguntas que finalmente habíamos conseguido recopilar.

De cada examen de años anteriores que revisábamos, nos encontrábamos preguntas sorpresa que no sabíamos por donde meterle mano, de modo que nos asustaba lo que podíamos encontrarnos, teniendo en cuenta que aún llevábamos poco tiempo en la escuela de vuelo...

Llegó el día del examen e hice todo lo que pude...

El resultado podía tardar en llegar unas 4 ó 5 semanas, según nos dijeron, así que esperé pacientemente cuando, de repente, a los 5 días recibimos un mensaje de whatsapp de nuestro instructor con el resultado..... APROBADO!!!!

De las 80 preguntas del examen, saqué el 91% de resultados positivos, por encima del 75%  exigible para aprobar, de modo que reto conseguido. Del mismo modo, mis amigos Víctor y Nacho también superaron la prueba con nota, de modo que 100% de éxito para todos nosotros!!

A partir de ese momento, ya podría centrarme sólo en volar y disfrutar de la parte práctica, para lo que sólo necesitaría tiempo y dinero!!!

De todos modos, no considero que aprobar un examen sea suficiente para saber todo lo necesario para volar, de modo que tanto yo como mis amigos decidimos seguir asistiendo cada viernes a las clases teóricas para seguir aprendiendo de procedimientos, emergencias, comunicaciones y un largo ect de cuestiones importantes para volar con seguridad...

Hasta la próxima, amigos!!

Dani M.

Segundo vuelo....

Hola de nuevo, queridos amigos!!

Ayer estuve haciendo mi segundo vuelo y en seguida noté que cada vez voy a disfrutar más de esta aventura... Estuve bastante más relajado y hasta fui capaz de observar más detenidamente aquello que estaba sobrevolando!!

El recorrido realizado fue similar al de la primera clase, aunque en esta ocasión el viento era casi nulo y sentí mucho más el control de la aeronave, pudiendo dedicar más atención a familiarizarme con los instrumentos de a bordo.

También practiqué algunas maniobras de cierta importancia, como un 360 que hice alrededor del cerro de Hita y un 8 que hice en un valle... Son maniobras que requieren una especial concentración para mantener la altura y una circunferencia proporcionada, para lo cual hay que mover rápidamente el cuello mirando a referencias exteriores, variómetro y altímetro sin parar.

Es curioso cómo hay cosas que te llaman la atención la primera vez que las haces, como la diferencia entre los virajes a izquierda y a derecha. Durante la primera clase, todos los virajes fueron a izquierda. En esta ocasión, al hacer el 8, pude experimentar la distinta sensación al virar a la derecha, pues parece ser un movimiento más acusado (al estar sentado en el asiento izquierdo, quedas más alto al virar a la derecha y da una mayor sensación de "profundidad" del viraje). Además, por el par motor, el viraje a izquierda tiene a subir el morro del avión, mientras que el viraje a derecha tiende a bajarlo....

Finalmente, hice una toma con 1 punto de flap en la que, del kilómetro de pista, utilicé unos 950m de ella, jejeje... Aun así, como me dijo Beni, un aterrizaje sano y salvo con un avión que podría usarse de nuevo, luego claramente exitoso!!!

Ya estoy impaciente por que llegue la siguiente clase de vuelo, pues seguro que aún iré disfrutando cada vez más, según dicen los más experimentados, aunque no puedo descuidar de seguir estudiando para el teórico... La fecha del examen está previsto para poco más de mes y medio!!!

En fin, voy a ver de nuevo el vídeo on board del vuelo, para seguir aprendiendo aquello que no haya podido captar mientras volaba, jejeje...

Un fuerte abrazo!!
Dani M.

Comenzamos a volar!!!

Queridos amigos...

Retomamos de nuevo el blog para deciros que, por fin, hemos comenzado a volar!!

Después de algún pequeño retraso con la documentación y el reconocimiento médico de Clase II, por fin teníamos todo en regla para comenzar a volar... Llevábamos ya varias clases teóricas en las que los compañeros comentaban determinadas sensaciones que sólo nos las podíamos imaginar, de modo que nuestra expectación con esta primera clase de vuelo era máxima. Llegamos el día acordado con bastante tiempo de antelación. Los nervios se iban incrementando en la misma medida que se aceleraba el viento. Según la página meteorológica, habían 26km/h de velocidad del viento, con rachas de hasta 54km/h... Eso era exagerado!! Si el Eurostar tiene la velocidad de pérdida en 58km/h full flaps, eso quería decir que una racha prácticamente podría levantar el avión del suelo desde parado!!

Cuando llegó Beni, el instructor, sinceramente yo esperaba un: "chicos, hoy no se puede volar, lo siento...", pero en lugar de eso nos dijo: "que?? Estáis preparados??"

Yo le mostré mi inquietud con esas rachas, pues era nuestro primer vuelo y, si ya tenía dudas de ser capaz de controlar el avión con viento en calma, con esas rachas estaba seguro que iba a sufrir de lo lindo!!

De modo que nos pusimos a hacer la revisión prevuelo. Estuvimos mirando con lupa cada rincón del avión, comprobando que cada cosa estaba acorde a lo que se esperaba de ella. Es algo que se debe hacer SIEMPRE, tanto en la escuela, como en el futuro si terminamos comprando un avión, de modo que mejor hacerlo bien para que todo tenga sentido...

Antes de darme cuenta, me encontraba sentado a los mandos del avión, en la parte del piloto, con Beni a mi derecha leyéndome la lista de comprobaciones antes del despegue. En un momento, carreteaba hacia la pista de aterrizaje, con la cara de ilusión  de un niño con zapatos nuevos!!

Nos detuvimos en la cabecera, hicimos las últimas comprobaciones de magnetos y estabilidad del motor y, poco a poco cogimos velocidad de despegue. Aún buscando una salida progresiva, una ráfaga de viento nos elevó de forma brusca. Lógicamente yo me asusté, pero al ver al lado a Beni tranquilo, con una sonrisa en la cara mientras me iba dando instrucciones a la vez que me grababa, me relajé. Me sentí muy agarrotado de piernas con el timón de dirección, pues la respuesta es muy rápida, pero según dicen, es habitual tardar un poco en adaptarse para manejar la dirección con los pies.

El vuelo fue corto pero intenso. En este primer vuelo oficial, se tenía como objetivo una toma de contacto con las instrucciones de Beni y las reacciones del avión. El viento racheado y cruzado lo hizo muy movido, pero el control de virajes, ascensos, descensos y guiñada lo tuve razonablemente controlado. En realidad, con lo movido del despegue, durante todo el vuelo estuve más que preocupado por el aterrizaje, aunque Beni insistía en que sería divertido, con técnica de viento cruzado, pero seguro.

Dimos una vuelta por Humanes, Taragudo, Alarilla, el embalse de Beleña y regresamos de nuevo a Robledillo.

El aterrizaje, como esperaba, fue muy técnico y me tranquilizó notar en seguida que Beni iba corrigiendo ligeramente mis movimientos. Según él, estuvo muy bien, pues me vio lo suficientemente tranquilo como para estar con una mano pendiente de corregirme y con la otra grabándome durante todo momento. La teoría la tenía más o menos clara, aunque en ese momento no me creía capaz de recordar ni mi nombre... Parece mentira lo rápido que pasa todo ahí arriba, sin tiempo para pensar!!!

Ya posados, mientras descendía la velocidad, una ráfaga cruzada nos hizo derrapar un poco las ruedas y otra vez lancé una expresión de asombro mientras Beni sonreía de nuevo...

Finalmente, llevé el Eurostar hasta el hangar, pues mis compañeros en esta aventura andaban absortos delante del panel del otro avión de la escuela y no se habían enterado de nuestra llegada. Allí mismo, lo dejé preparado para las siguientes salidas, cuyos protagonistas, si tienen tiempo, relatarán ellos mismos...

Nada, precisamente ahora mismo me tengo que ir a clase teórica, así que hasta la próxima entrega, queridos amigos!!!

Dani M.

Licencia de Alumno-Piloto

Hola a todos!!

Llegó el momento de comenzar los trámites burocráticos de esta aventura: la Licencia de Alumno-Piloto.

Para tramitar la Licencia y poder comenzar las clases teóricas y los vuelos, lo primero necesario es un reconocimiento médico de Clase II. Nada más decidir comenzar con el trámite, me puse a buscar clínicas que lo hicieran y, mi sorpresa fue que en toda la zona centro, únicamente había dos centros donde se podían expedir. En uno de ellos, el trámite era sencillo, pues la misma clínica hacía el reconocimiento y los análisis de sangre y orina en busca de drogas. La otra clínica te hacía el reconocimiento y te enviaba a un laboratorio donde te hacían los análisis, de modo que opté por la primera. Lamentablemente, cuando les llamé me daban cita para dos semanas después, de modo que no me quedó otra alternativa que pedir cita en la segunda clínica...

Lo preparamos todo para pasar primero por el laboratorio a los análisis. Cuando llegamos, nos hicieron pagar los casi 20 euros de la analítica y comenzaron a sacarnos la sangre. Posteriormente, la enfermera nos preguntó si teníamos inconvenientes en que ella hiciera "la custodia de la orina". Sin saber muy bien a qué se refería, aceptamos y, nuestra sorpresa fue que ella se encerró con nosotros uno a uno en el baño, para observar que la orina depositaba salía de dentro de nosotros y la prueba era correcta... Fue una experiencia cuanto menos curiosa, que una enfermera se asomara mientras meas en un vaso!!

No sin unas cuantas risas, fruto del nerviosismo del momento, fuimos a la clínica donde un muy veterano médico, nos completó el reconocimiento. Curiosas también algunas preguntas, como la forma y tamaño de los tatuajes que llevamos en el cuerpo, según el médico, para la identificación en caso de siniestro.

Ya con el reconocimiento terminado, fuimos al aeródromo ese mismo día, pues a la que entregábamos el resto de documentación (fotocopia del DNI y fotografías), podríamos asistir a nuestra primera clase teórica. Fueron tres horas de charla que, al menos yo, nunca olvidaré, pues ya nos comenzábamos a sentir como pilotos, hablando de procedimientos, pérdidas, meteorología, etc... 

En fin, en próximas entradas, hablaremos del formato de las teóricas y la manera en que las aprovechamos... Mientras, tenemos que esperar que nuestro reconocimiento médico y el papeleo pase por aviación civil y, en un par de semanas más o menos, disponer de nuestra Licencia de Alumno-Piloto que nos permita comenzar oficialmente los vuelos.

Un fuerte abrazo,

Dani M.

Elección de Escuela!!

Queridos lectores!!

Como habréis leído en la entrada anterior, el siguiente paso de nuestro viaje es elegir la escuela donde hacer el curso. Esta es una decisión muy importante, no sólo para los meses venideros sino para nuestro futuro como pilotos bien formados.

La primera criba la redujimos a dos candidaturas: Aerocaña (Ocaña) y Mydair (Robledillo de Mohernando).

En primer lugar, concretamos una visita a Ocaña, pues el modelo de aeronave (una Tecnam P92) se asemejaba algo más a mi objetivo de compra a largo plazo. Cuando llegamos, el instructor, Alejandro, nos esperó con una sorpresa: un vuelo de prueba a los mandos de media hora cada uno. Por mi parte, aquello fue una experiencia que nunca olvidaré!! Nunca había subido en ninguna avioneta más pequeña que los aviones comerciales habituales, y ahí estaba yo, directamente a los mandos!!

Dimos una vuelta por los alrededores, sobrevolando Ocaña, Noblejas, Ontígola, etc... Durante el despegue acompañé a los mando al instructor y, una vez arriba, estuve siguiendo sus indicaciones ya hasta el aterrizaje. Virajes, giros 360, ascensos, descensos... Me parecía mentira que todo fuera tan sencillo, como tantas otras veces practiqué en los simuladores!!

El aterrizaje fue simple, lento y muy seguro... Me encantó el comportamiento de ese avión, aunque todo era extremadamente pequeño e incómodo desde dentro.

Salimos los tres muy contentos con la experiencia y, yo ya habría cerrado el trato si no es porque Víctor, de forma más práctica y prudente, me recordó que aún debíamos probar la otra escuela. Además, si bien es cierto que el vuelo había sido muy sencillo y excitante, debo reconocer que la falta de experiencia docente del instructor (un jubilado que, para mantenerse activo durante su jubilación, había montado su propia escuela), hizo que realmente nos preguntáramos si ese tipo de escuela era la adecuada para aprender todo aquello que te puede salvar la vida en cualquier momento...

Finalmente llegó el momento para probar en Mydair y, para ello, utilicé una Smart Box que me regaló Maribel por mi cumpleaños. Como creía tan importante que lo experimentara mi mujer como yo, pues era la mejora manera de conseguir su complicidad con mi sueño, decidí compartir mi vuelo para hacer mitad ella y mitad yo. Primero salió ella e hizo un vuelo de unos 15 minutos que, incluso, llegó a manejar a ratos... Se bajó muy contenta y satisfecha con la experiencia y eso me llenó de esperanza con esa escuela.

Posteriormente, me tocó el turno a mi y, en lugar del vuelo contratado de 15 minutos, estuve haciendo uno de más de media hora con el instructor, Benito. Como curiosidad, en est ocasión me colocó donde el acompañante, pues no era una clase al uso... Aquello fue determinante para decidir dónde quería sacar la licencia!! Benito está a años luz del anterior instructor, por su profesionalidad, su forma de explicar y su pasión por el vuelo. Además, la aeronave es una pasada... Es una EuroStar de Evektor, de ala baja, y con unas características en vuelo fantásticas. El vuelo fue una delicia, cogiendo los mandos ya en el aire y, de nuevo, llegar a aterrizarlo con la supervisión de Benito. Al terminar el vuelo, estuvimos hablando de los medios disponibles por la escuela y de la forma de pago, totalmente personalizable. No fue difícil tomar la decisión y, tras comentar con Víctor y Nacho mis sensaciones, la escuela elegida para cumplir nuestro sueño fue Mydair!!

En las próximas entradas iremos explicando el proceso de la obtención de la Licencia de Piloto Alumno, sobre todo, las exigencias del Reconocimiento Médico.

Hasta la próxima!!!

Daniel

Presentación de los protagonistas y sus objetivos...

Hola a todos!!

Un día nos juntamos tres amigos que, algunos desde pequeños y otros más recientemente, compartimos el sueño de volar a los mandos de un avión. El objetivo del presente blog es el de compartir mis experiencias en el duro, pero bonito camino que recorreré junto a mis amigos hasta obtener la deseada Licencia de Piloto ULM. Espero que me acompañéis durante la consecución de este sueño y disfrutéis de aventuras y anécdotas que me vayan surgiendo.

La historia comienza así...

Tras un tiempo dándole vueltas al coco y convenciéndonos unos a otros, finalmente a mediados del año 2014 decidimos que para el siguiente año, el 2015, comenzaríamos el reto de buscar una escuela de vuelo para cumplir nuestro sueño de pilotar. A las primeras de cambio, nos dimos cuenta que la forma más asequible de hacer realidad nuestro objetivo, era la opción ULM (Ultra Ligero Motorizado). Las otras opciones fueron descartadas, o bien porque no cumplían nuestras exigencias (p. e. parapente), o directamente porque se salían de nuestras posibilidades económicas (p. e. PPL).

Una vez teniendo claro nuestra meta, la siguiente duda era... Cuándo hacerlo??

A finales de 2014, nos pusimos como fecha de inicio de nuestra andadura el primer trimestre de 2015. Para ello, tendríamos que dedicar las primeras semanas del año a evaluar las distintas escuelas, teniendo en cuenta variables como la cercanía, el precio, la calidad de las instalaciones y los instructores y el tipo de aeronave... Finalmente el cerco se estrechó en dos opciones: la Escuela de ULM de Ocaña (Aerocaña) y la Escuela de ULM de Robledillo de Mohernando (Mydair).

En la siguiente entrada, desvelaremos la escuela elegida y las razones de haberlo hecho, de modo que no dejéis de acompañarnos....

Felices vuelos!!!

Dani M.